Me maravillo al observarlo, y no dejo de hacerme preguntas
¿Es éste el creador de las miríadas de yoes antagónicos que pugnan por manifestarse y tomar el control?
¿Es ésta la mazmorra de los demonios que permanencen en la sombra conspirando en secreto?
¿Es éste el que guarda retazos de todos los momentos que me han conmovido y me han afligido?
¿Es aquí donde reside el soñador, el payaso, el maníaco-depresivo, el poeta, el bueno, el malo, el buscador de la verdad, el obseso, el actor, el amante de la belleza, el hipocondríaco, el vanidoso, el tímido, el nostálgico, el risueño, el triste, el alegre...?
¿Es éste el que ama, el que odia y el que permanece indiferente?
¿Es éste el que ve, huele, palpa, degusta y oye?
¿Es éste el que crea mil y una maneras, a cual más exótica de ocultar el temor al drama de la vida: nacimiento, vejez y muerte?
¿Es éste el simulador que pone una realidad en pantalla, que se desvanecerá por completo cuando se desconecte?
¿Es éste el que almacena toda la herencia filogenética, de la familia, de la cultura, de la especie, del planeta, del universo mismo?
¿Es éste el que, agraciado con la chispa de la consciencia, se pregunta por sí mismo, y anhela ir más allá de sí mismo?
¿Eres tú quien hace todas estas preguntas?
¿Qué es esto? ¿Quién soy yo?
Muhaken
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