lunes, 1 de abril de 2024

BUDDHA, el que vive engarzado en la Totalidad


 


Cuando el Budismo se expandió hacia China durante la dinastía Han (206 aec - 220 ec), surgió la natural necesidad de traducir los términos budistas, principalmente escritos en sánscrito, a las grafías y al lenguaje chinos.

La escritura china opera de manera distinta a sus homólogas basadas en sonidos que conforman palabras elegidas arbitrariamente (o derivadas de otras escritas arbitrariamente) para designar conceptos, ideas, objetos, acciones, etc. 

En su lugar, la expresión escrita china está basada en gráficos que representan ideas, o nubes de significados, pictográficame relacionados con aspectos de la realidad que pretenden representar, que impactan en el inconsciente y se condensan en conceptos concretos según el contexto.

Los sinogramas que se eligieron (y algunos crearon), para representar conceptos indios, escritos en sánscrito, debían evocar en sus trazos, las ideas contenidas en la palabra que se pretendía traducir; y en algunos casos también sonar de manera similar a la palabra original.

Además de esto, los ideogramas añadieron una nueva capa de significado a los términos heredados, agregándoles nuevos matices y enriqueciéndolos con la cosmovisión taoísta, enraizada en la zona de acogida.

Buddha es un epíteto aplicado al fundador histórico del budismo, Siddharta Gautama y proviene del sánscrito, derivándose del participio pasado de la raíz budh, que significa “despertar, conocer, percibir”. 

A su vez, esta raíz está relacionada con el sánscrito bodhati, que significa “estar despierto, observar, comprender”  Su origen se remonta a la prehistoria del sánscrito védico y se desarrolló a lo largo de milenios de transmisión oral y escrita en la India antigua, y que proviene a su vez de la raíz protoindoeuropea bheudh-, que se traduce como “estar consciente, hacer consciente”

La raiz ”budh” se encuentra en una variedad de palabras en sánscrito, algunas de las cuales citamos: "bodhi" (iluminación) "buddhi" (intelecto, en tanto que uno de las 25 tattvas o principios de la realidad, según la filosofía samkya) y "buddha" (despierto, iluminado). Estas palabras comparten una conexión conceptual con la idea de despertar, iluminación, o conocimiento y todas derivan de la misma raíz verbal "budh".

Buddha en sánscrito. Escritura Devanagari


Cuando el príncipe Siddharta Gautama, realizó el Supremo Despertar, y dedicó el resto de su vida a compartir el camino que había realizado, empezó a ser conocido como Buddha Sakyamuni, y en la práctica se convirtió, en el seno del budismo primitivo, en un término para designar en exclusiva a su maestro fundador.

Siglos más tarde, con el advenimiento de la corriente Mahayana, el término buddha, amén de otras consideraciones arquetípicas, pasó a tener un aplicación más amplia, designándose como Buddha, a todo aquel que ha alcanzado la iluminación, a todo el que, como Sakymuni, ha rasgado los velos de la ignorancia, y ha comprendido la realidad tal y como es,  materializando con ello la comprensión directa de la naturaleza del sufrimiento, su origen, su cesación y el camino que conduce a su cesación.

Buddha en sánscrito. Escritura Siddham

Una vez realizado este pequeño recorrido por el significado de la palabra objeto del presente análisis, vamos a estudiar de qué manera se pretendió “pintar” parte de dicho significado en un sinograma.

En primera instancia, se utilizaron estos dos ideogramas para representar la palabra/idea/concepto Buddha:


La pronunciación actual de ambos caracteres es “fotuo” en chino mandarín, sin embargo en el chino antiguo, la manera de pronunciarlo era “buth-dah”, imitando a nivel sonoro la transliteración de la palabra original sánscrita “buddha”

El segundo sinograma, (tuo/dah) tiene algunos significados como  “escarpado”, “muy inclinado”, “profundo”. Pudiera pensarse que aporta noción de “grandeza” , de “profundidad”  y de “dificultad de alcanzar” al concepto de Despertar evocado en el primer ideograma (como veremos a continuación), pero no se ha encontrado documentación al respecto, y esta apreciación no deja de ser un impacto subjetivo que la información semántica causa en mi cerebro, sin el contexto en el que este símbolo fue elegido.

Parece ser que (tuo/dah), prácticamente sólo aportó una contribución sonora (dah), a la hora de transliterar el sonido sánscrito Buddha, y con el tiempo cayó en desuso, prevaleciendo el primero de los dos ideogramas expuestos en la anterior imagen: (fo/buth)


El radical marcado de la izquierda no alberga debate. Se trata del ideograma   (neng/lang/nang), que representa a una persona caminando, y quiere decir: persona, individuo, o “yo” en el sentido de individualidad.

De esta manera, el segundo radical, contiene el meollo del significado, las características que se le atribuyen a una persona o a un yo


Para desmadejar el significado de (fu/pu) hay que escarbar un poco en sus radicales más básicos.

Uno de sus componentes de (fu/pu) es el ideograma/radical (gong/kjuwng), cuyo significado principal es el sustantivo arco (el arma que lanza flechas), curva o bien los verbos doblar, curvar, arquear. 

(gong/kjuwng) es familiar en el ámbito de las artes marciales tradicionales japonesas, ya que forma parte de la palabra kyûdo (tiro con arco tradicional)

Kyûdo, la Vía del Tiro con Arco



Las dos líneas verticales que dan forma al resto del ideograma (fu/pu) representan dos flechas. Dado que al caligrafiar este pictograma, en primera instancia se realizan los trazos correspondientes al arco, y seguidamente los de ambas flechas, la idea general del gráfico evoca la imagen de un arco con dos flechas encima, elementos que han sido dejados en el suelo, y que ya no se van a volver a usar. Dicho con otras palabras, representan la imagen de reposo, o cese de actividad.

Por otro lado, y dependiendo de la versión y época del sinograma en la que nos centremos para ampliar nuestro estudio, la imagen evocada puede interpretarse gráficamente de forma diferente:

Por ejemplo, si nos remontamos a la Dinastía Zhou del Oeste (1046 aec – 771 aec), la imagen mental que nos evoca el estilo de ideograma que se usaba en las tallas en bronce, para representar (fu/pu)  es ligeramente distinta a la de unos arcos y unas flechas.



Aunque se trata de una representación mucho más antigua que la época de la llegada del budismo a China, es interesante el hecho de que sugiere la idea de dos flechas/lanzas atadas con una cuerda, o dos agujas atadas juntas con un hilo. Ésta interpretación del hilo guarda un significado adicional al que volveré más adelante.

Arcos y flechas que se dejan de lado, lanzas que se atan para ser guardadas, agujas sujetas con un hilo. Todas esas interpretaciones dan lugar a la idea consensuada con respecto al carácter (fu/pu) y es su significado como “negación”, “no” o “ausencia de”. Es decir, su presencia indica la ausencia de la palabra o radical al lado del cual se encuentren.

En nuestro caso observamos que en (fo/buth) se está negando la presencia de una persona o un yo. O dicho de otra manera, se está afirmando la ausencia de una persona o un yo

Es decir, el sinograma elegido para representar la palabra Buddha, parece contener parte de las enseñanzas heredadas del Budismo Mahayana que llegó a China. 

Recordemos que las enseñanzas budistas precognizan tanto la naturaleza vacía del ego (ahamkara / jiko), como la ausencia de identidad propia individual (tanto divina como material) de todos los fenómenos, en lo que se conoce como anatman. En otras palabras, no hay (negación) ninguna entidad individual que exista por sí misma y permanezca idéntica a sí misma en el curso de la existencia.

(fo/buth) parece entonces evocar la idea de un Buddha en tanto que ser humano que ha disuelto la ignorancia que le hacía percibirse a sí mismo como ser individual, y otorgaba a su ego entidad propia. Quien ha trascendido esta identificación, es un Buddha, y quien no, aún vive atrapado en el mundo de la ilusión (Maya)

Sin embargo, algunos sinólogos como David Hinton, proponen la existencia de una capa más profunda y sutil de significado, transmitida a través del sinograma en estudio, y que se encuentra arraigada en la visión taoísta del mundo imperante en la época en la que el budismo arribó China.

En la figura siguiente, podemos ver a la izquierda la representación de (fo/buth) que aparece en el diccionario Shuowen Jiezi, compilado en la dinastía Han, en donde puede apreciarse una aproximación gráfica que sugiere la idea de un tejido que está siendo hilvanado.

A la derecha de dicha figura, podemos ver el mismo sinograma, tal como fue recogido en el diccionario Liushotong, que aunque su compilación fue muy posterior (dinastía Ming), continúa recogiendo la versión del ideograma (fo/buth), desarrollando la idea del tejido. En esta ocasión se observa lo que parece ser un hombre, un ser humano, al lado de un telar. 


Esta interpretación, según el sinólogo David Hinton, contiene un profundo trasfondo taoísta, dándole al concepto de Buddha el mismo significado que el ideal de realización de un adepto practicante de taoísmo filosófico/iniciático. Es decir, aquel que vive engarzado, integrado con el Tao

Es decir, Buddha, según la cosmovisión china, es aquél que en un sentido prágmático, vive identificado con el tejido de la existencia en su totalidad, con el Tao, y lejos de pretender morar en un vacío metafísico fuera del mundo del samsara, aspira a vivir alineado con sus infinitas transformaciones, no viéndose identificado con ninguna de ellas, y siendo parte integral, entretejida de las mismas.

Éste es el significado profundo de budeidad que heredó el Chan (posterior Zen), y la realización a la que, aun sin saberlo en muchos casos, aspiran sus adeptos, enraizada profundamente en la cosmovisión de los ancestros taoístas.

         -- Muhaken --

1 comentario:

Anónimo dijo...

Excelente como siempre Carmelo, echaba de menos tus textos! Buen trabajo!